La diferencia entre ambas cosas es el hecho de la realidad. La telepresencia implica como su nombre indica la presencia de la persona en el lugar de los hechos, no importa si está aislado en una càpsula, en una nave o en una sala alejada, porque simplemente la persona se manifiesta allí en carne y hueso.
La realidad virtual es también como su nombre indica virtual, es decir no real, ficticia. Podemos ver lo que ocurre en tal lugar pero nos resultaría imposible acceder a ello. Vi interesante la idea de poder simular realidad a través de proyectores que daban a entender que estabas en la cama al lado de alguien, parece increíble que podamos estar con alguien y verlo pero no tocarlo. Muchas personas pueden sentir sensaciones de esta forma que quizá nunca podrían recrear. Aún así, todo son propuestas interesantes pero prefiero telepresencia antes que realidad virtual, porque me declino por lo real, lo que se puede sentir, lo que es de verdad antes que lo simulado, la ilusión, lo fictio porque al fin y al cabo, no deja de ser un engaño visual.
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